No tengo palabras suficientemente buenas para describir este taller. Sólo me doy cuenta de lo poco que conocía los deseos y las zonas erógenas de la mujer. Ahora puedo tratar a mi pareja tal y como se merece.
Una experiencia absolutamente liberadora, intensa, cuidada, respetuosa. Me siento muy agradecida por tanto recibido y tanto entregado. ¡Gracias, gracias, gracias!
Cuando llegué, vine con ganas de llorar y ahora solo tengo ganas de reír. ¡Qué cambio!
¡Qué taller más potente, ha sido genial! Me ha vuelto a demostrar que todo es posible y a atreverme a sacar mi sexualidad, esencia y sensibilidad.
Para ser mi primera vez, al principio estaba muerto de miedo por no saber como reaccionaría en una situación tan diferente al mundo en el que vivimos lleno de tabúes. Después de terminar, puedo decir que el taller no me ha aportado nada negativo, sólo me llevo cosas bonitas y positivas. Miradas desde el corazón, sentimientos expresados con una sola mirada, la naturalidad con la que Elma plantea el taller lo hace todo muy fácil, es como volver a ser niño. Me llevo mucho, mucho más de lo que esperaba.
El taller me ha enseñado las diferencias a la hora de dar masaje teniendo en cuenta si eres un hombre o si eres una mujer. Ha sido muy sorprendente y super interesante de aplicar.
Mi experiencia ha sido muy sensual y con la energía sexual muy expandida. ¡¡¡Una pasada!!!
Este taller ha sido un pasito más en la relación con mi pareja. Sentir sus caricias, sus manos en mi cuerpo… hacer esto juntos ha sido muy especial e interesante. Nunca antes había sentido tanto sus manos. Gracias por tanto.
Una experiencia de apertura, de dejarse llevar, que me ha reavivado por dentro. Me siento muy agradecida. Elma siempre lleva con tanta naturalidad los talleres que te dejas llevar sin darte cuenta.
Me ha sido útil para recibir un baño de cariño y encontrarme conmigo mismo. Romper barreras, aprender a desconectar de historias pasadas y a no juzgar.
Me ha ayudado a conocerme a mi misma y a darme cuenta que los límites los marca la cabeza. Somos tan libres como nos permitimos ser. ¡El taller es una gran experiencia!
Ha sido mi primer taller y me he sentido muy cómoda en todo momento. Me ha ayudado a conectarme con la energía masculina, a desbloquearme, a compartir, a dar y a recibir… a volver a confiar.