¡Esto es suficiente! Una gran experiencia

lo que tengo es suficiente

Quería compartiros algo que me pasó hace poco…
Volvía  a casa después de unos días de estar fuera. Al abrir la nevera tenía comida que no iba a comer y que me sabía muy mal tirar. Ese día quedé con una amiga para cenar y antes de bajar, me acordé que debajo de mi casa frecuentan unos mendigos, así que, cogí una bolsa, puse toda la comida dentro y fui en busca de ellos para dársela.
Me encontré a uno de ellos en un parquecito y me acerqué a él.
Esto es lo que sucedió:

ELMA         – Hola, traigo un poco de cena. ¿Te apetece?

MENDIGO – Hola, muchas gracias pero no. ¡Ya tengo suficiente!

Miré a su lado y tenía un pequeño bocadillo.
Me quedé en silencio, sorprendida y él continuo diciendo:

MENDIGO – Además soy un mendigo y no tengo sitio donde guardarlo y mira que barriga que tengo. ¡Jajajaaja!

El hombre sonriente, riendo, alegre…

MENDIGO – Dáselo a otro que lo necesite.

ELMA         – Vale, que tengas una buena noche. Adiós.

MENDIGO – Adiós, ¡sé feliz!

¡¡¡Wowww, me quedé tan sorprendida!!! ¡¡¡Qué regalo me hizo este hombre!!!

Qué honestidad… Él no estaba pensando en mañana, no se dejó llevar por las imágenes de la mente de lo que iba a comer al día siguiente.. Fue honesto, tenía suficiente en ese momento. Y si en este momento tengo suficiente, ¿necesito más?

Él estaba sonriente, viviendo el momento presente, agradecido y a la vez honrando su verdad.
Me encantó la experiencia de ser libre de ofrecer y de que él fuera libre de decir no. Eso es maravilloso, si viviéramos las relaciones con la consciencia de que yo soy libre para pedir, ofrecer o proponer, y que el otro es libre para decir sí o no… Si tuviéramos claro la diferencia entre tu asunto y el mío…. ¡Oooh, relacionarse se convertiría en una experiencia muy fácil, amorosa y libre!

Me quedé toda la semana meditando sobre esto y fue realmente bonito. Esto lo podemos llevar a un plano tan profundo… no sólo al tema material, sinó a todo aquello que tienes o no tienes en tu vida.

Lo que tengo es suficiente.
¿Y como sé que no necesito nada más ?
¡Fácil! Porque no lo tengo.
Lo que tengo es lo que necesito, si no lo tengo no lo necesito.

Un abrazo a ti que estás detrás de la pantalla.
Elma
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